"el aquelarre" Goya.
...y los profetas se sentaron a esperar con ansia el resultado de sus predicciones apocalípticas. Sus discípulos, ansiosos y desesperados, rasgaban sus vestiduras sin hacer nada más que protestar criticar y revelarse contra la esperanza, convirtiéndose, sin saberlo, en verdugos y víctimas de la propia profecía. Nada les sucedió, a los profetas.Durante la noche, cuando acallaron las sirenas del peligro, salieron de sus cuevas, satisfechos, con renovados sueños de desastres.
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